La formación en comercio exterior que crea profesionales

Desde hace unos años a esta parte, vemos, no sin asombro, como hoy día cualquier universidad o escuela de negocios se lanza a impartir programas formativos en comercio exterior. Y observamos, el desconocimiento de estas universidades y escuelas de negocio en la materia a través de los programas.

Una de las principales cuestiones es la confusión existente entre comercio exterior y comercio internacional, ¿es lo mismo?, ¿hay diferencias?. Sin duda no es lo mismo cuando nos referimos al comercio exterior que cuando lo hacemos al comercio internacional.

El comercio exterior se refiere a las relaciones comerciales entre empresas, po lo tanto, a las actividades de exportar, importar y triangular. En cambio, el comercio internacional afecta a las relaciones entre países y por ello a las relaciones internacionales. Y lo uno y lo otro tiene una gran incidencia en los programas formativos y a los perfiles profesionales a los que van dirigidos.

Quien imparte comercio exterior no puede ser un teórico, no puede ser alguién que ha estudiado una materia relacionada con el comercio exterior y nada más. Ha de ser, por necesidad, un profesional que ha desarrollado la actividad que posteriormente imparte. Por lo tanto, es un trasmisor de conocimiento a traves de la experiencia. Sin duda, apoyada en las normas que desarrollan el comercio exterior. El docente de comercio exterior es un profesional que forma a profesionales a través de la normativa y de la experiencia profesional.

Un docente que imparte la materia aduanera es un profesional que ha desarrollado su actividad en el ámbito aduanero y tiene capacidades, no siempre es así, de poder transmisitir su conocimiento a los demás. Así, quién imparte logística del comercio exterior, o medios de pago internacionales o financiación del comercio exterior, o contratación internacional, por poner otros ejemplos, ha de ser un profesional que se ha desarrollado en esos campos relacionados con el comercio exterior. De no ser así, estaremos "engañando" al alumnado ofreciendo una formación teórica o seudopráctica que no se ajusta a las verdaderas necesidades de los profesionales cuando se desarrollan en el mundo real de la actividad internacional.

Por ello, los programas que se desarrollan de forma amplía, extensa y precisa nos pueden ayudar a interpretar la calidad de quiénes posteriormente lo van a impartir. Además, quiénes ya se desarrollan en el comercio exterior saben que es un campo extenso y profundo, y por ello, no es lo mismo un operativo de exportación que un comercial de exportación; o un operativo de importación que un comercial de compras internacionales. Y que las capacidades para desarrollar una operación triangular no son las mismas que las que necesita un profesional para llevar a cabo operaciones de exportación.

Por otro lado, no es lo mismo un máster dirigido a profesionales que se desarrollan o van a desarrollarse en los ámbitos operativos y comerciales, que un máster para un profesional que tiene o va a tener competencias en las planificación y estrategía internacional de la empresa.

No nos dejemos emgañar con espejos y piedras transparentes, y fijémonos más en el como están estructurados los programas y a qué perfil profesional del comercio exterior se dirige.

Autor: Educatio Humanum