Construyendo temarios dinámicos

Construyendo los temarios dinámicos o como preparar un examen desde el primer día de clase

Los temarios son sumamente importantes a la hora de preparar exámenes. Los estudiantes generalmente acostumbramos a armarlos en miras de una evaluación, especialmente finales. Pero ocurre a veces que una vez armado el temario, se descubre que aparecen temas que no se vieron o se agregan otros que uno no sabe bien de dónde sacarlos. Y ya es tarde, puesto que hay que estudiar para el examen.

Por otro lado, suele ocurrir que se calcula mal la cantidad de tiempo a dedicarle a un examen debido a que el temario se arma al comenzar a estudiar y no antes. Por lo tanto, una mejor idea, en vez de hacer el temario al final, es ir armándolo clase a clase. Lo que nos da como resultado, un temario dinámico.

Luego de cursar cada clase en la universidad, podemos ir actualizando el temario, incluyendo los temas que se dieron. Esto, en complemento con el programa de la materia tiene que ser suficiente para que al finalizar la cursada, tengamos el todo listo para empezar a estudiar.

Encuentro dos beneficios importantes de ir armando el temario de forma dinámica y progresiva:

Permite mantenerse al tanto de cómo va la materia. Cuántos temas faltan por dar, cuántos se han visto, cuáles son los más importantes. Es una forma de estar enchufado y de tener en cuenta en cada momento en qué lugar se está parado respecto a la asignatura. Una especie de brújula.

Permite calcular mejor el tiempo de estudio que se va a necesitar para preparar el examen. Se evita la sorpresa del primer día de preparación descubrir que los temas eran más de los previstos y que ahora todo es contra reloj.

Llevar un temario dinámico es sumamente fácil, solo se requieren unos minutos después de cada clase. El beneficio de hacerlo se ve a la hora de empezar a preparar el examen.

Fuente: Mentes Liberadas

Alejando de Lucas