Aumento de la demanda de técnicos de comercio exterior

Los especialistas en Comercio Exterior se han ganado un espacio clave en las empresas: las ayudan a expandirse desarrollando nuevos mercados externos, saben dónde y cómo abastecerse de productos e insumos importados para dar continuidad al negocio o conocen las normas y procesos logísticos que permiten importar y exportar.

En los últimos años este perfil cobró mayor importancia en la agenda de las compañías hasta llegar -en muchos casos- a reportar a la dirección general y sentarse en las reuniones de directorio. Actualmente, las restricciones a las importaciones y compras de divisas los enfrentan a nuevos desafíos.

"Si bien se siguen demandando las tradicionales competencias técnicas, hoy tienen mayor peso las habilidades interpersonales y políticas, como la 'cintura' y la capacidad de negociación: también se valoran la experiencia y el oficio", subraya Ornela Bonomi, consultora de Ghidini Rodil.

Según Martin Clément, gerente general de Clément Comercio Exterior, la demanda es creciente. "En función de nuestra experiencia, en un contexto cada vez mis complejo (nuevas normas, restricciones gubernamentales, costos crecientes y pérdida de competitividad, entre otras cuestiones), todas las industrias que de alguna manera están presente en los mercados internacionales necesitan cada vez más profesionales calificados en Comercio Exterior", señala.

La formación de grado en este campo es diversa. "Lo que más importa para este puesto son la experiencia y el conocimiento, por encima de la carrera que hayan cursado, que puede ser de Ciencias Económicas, Administración, Marketing o Ingeniería", afirma María Mirta Pascuali, gerente de la consultora Valuar, que este año realizó búsquedas de gerentes de Comercio Exterior para consumo masivo, químicas y bodegas.

"La trayectoria y especialización en determinados mercados, regiones o productos tiene mayor relevancia al momento de contratar a estos ejecutivos", prosigue Pascuali, y admite que "su demanda está muy relacionada con el desempeño de la economía".

El perfil varía también de acuerdo con las responsabilidades a asumir. Si la persona tiene un perfil de Ventas -porque debe encargarse del desarrollo de la estrategia de exportaciones de un producto- o si tiene un perfil más técnico -ya que debe ocuparse de los procesos logísticos, de distribución y de los trámites aduaneros-, las competencias y la experiencia previa son diferentes", distingue Florencia Álvarez, consultora de Valuar. "En el primer caso se valorará la orientación comercial, mientras que en el segundo se tendrán más en cuenta los conocimientos técnicos ligados a los procesos de comercio exterior", amplía la especialista.

Habilidades

Partiendo siempre de un muy buen nivel de inglés, las habilidades distintivas de los profesionales de Comercio Exterior son, para Álvarez, las relaciones interpersonales -como la capacidad de adaptarse a diferentes culturas, mercados y realidades-, "ya que, muchas veces, gran parte de su trabajo consiste en desarrollar la relación con el importador o el distribuidor de los productos en el exterior".

Una visión similar tiene Martín Clément para quien las habilidades de negociación y orientación al cliente son fundamentales. En cuanto a lo técnico, Clément destaca que en este mercado se exige "un bagaje importante de conocimientos sobre las normas cambiarías y las últimas regulaciones".

Y agrega: "Estas habilidades son necesarias puesto que estos profesionales tienen hoy en día la ardua tarea de encarar las gestiones frente a las autoridades, para poder importar sus insumos críticos. También deben implementar circuitos administrativos para controlar eficientemente los cambiantes plazos para el ingreso de divisas y explicar todo esto a jefes y dueños de las empresas, quienes muchas veces no alcanzan a dimensionar lo crítico de estos procesos".

Pese a la importancia creciente de las habilidades "blandas", el responsable deComercio Exterior "no debe perder el foco, ya que el puesto mantiene sus aspectos técnicos: sigue exigiendo la realización o control de tareas operativas, administrativas, de trámites aduaneros y de documentación, y seguimiento de embarques", señala Bonomi, de Ghidini Rodil.

Las principales normas que actualmente se requiere conocer son, "sin dudas, las normas cambiarías y las nuevas declaraciones juradas anticipadas de importacióny para pago de servicios”, sostiene Martin Clément. “Aunque también es importante que dominen las normas más específicas que podrían afectar la operación de cada empresa de acuerdo con su industria", completa el especialista en Comercio Exterior.

Sobre los conocimientos técnicos que se demandan, Bonomi, por su parte, destaca la normativa del Banco Central, códigos aduaneros, cotización de divisas y comercio internacional.

Fuente: Diario Clarin

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